Las palabras fluyen como lluvia dentro de una taza de papel
se deslizan al pasar se desvanecen a través del universo.






I'll get to you somehow.
Picture yourself in a boat on a river with tangerine trees and marmalade skies.
Somebody calls you, you answer quite slowly, a girl with caleidoscope eyes.
I once had a girl, or should I say she once had me? She showed me her room, isn't it good, Norwegian wood? She asked me to stay and she told me to sit anywhere, so I looked around and I noticed there wasn't a chair. I sat on a rug, biding my time, drinking her wine. We talked until two and then she said "It's time for bed". She told me she worked in the morning and started to laugh. I told her I didn't and crawled off to sleep in the bath. And when I awoke I was alone, this bird had flown. So I lit a fire, isn't it good, Norwegian wood?
feeling you holding me tight, tight
Closer,
Let me whisper in your ear,
Say the words you long to hear,
I'm in love with you.

viejo.




Y ya no me dan ganas de escribir. ¿Para qué? ¿Para confirmar una vez más que tengo la certeza de no volverte a tener jamás en mi corazón? ¿Para sentir una ausencia en lugar de tu presencia? ¿Para sentirme nuevamente el ser más inútil, infeliz y solo en el mundo? No, paso. Me doy cuenta que siendo yo, no estoy ganando nada; pero no se si dejando de ser yo ganaría lo que busco y perdería lo que tengo. Ya no entiendo nada, ni a mi ni a nadie. No hay juego más rídiculo que el de las palabras que se contradicen. No existiría materia más absurda que aprender a amar, (si la hubiese) pero que bien nos vendría a muchos. No hay momento más rídiculo, que sentarme a soñar con algo que se qué NO VA A LLEGAR. Por momentos me siento más cerca, ¿Cerca de qué? no sé. Pero si era ayer cuando soñábamos juntos, cuando soñabas conmigo. Cuando te soñaba, y te tenía. ¿De que me sirve soñar si no tengo nada de lo que quiero? Se sueña de a dos, se ama de a dos, se vive de a dos. Y busco, busco a mi ese "otro yo", a mi "media naranja" qué no encuentro. que creo que vos tendrías que ser pero no lo sos. Y entonces vuelvo a buscar, pero no encuentro a nadie que me haga sentir lo qué vos. La nada cae en un todo, y ese todo me lleva a nada nuevamente. El tiempo rompe las puertas que no lo dejaban pasar, y a mi corazón también. Las esperanzas caen y se levantan de a ratos, por momentos si, por momentos no. Señales busco, que de nada sirven. Si lo imposible no existe, y todo se logra con esfuerzo, necesito saber QUÉ MÁS TENGO QUE HACER. Necesito saberlo. Creo que ya nada esta a mi alcance, y nada hay para ayudarme a alcanzarlo. Es raro tener esa predilección por alguien que no vale lo que creo, pero captura, atrapa y no sé cómo, y eso me puede aún más. Hay gente mejor, más linda, más buena, más todo; pero no importa en lo más mínimo. El amor produce en mi, una adicción, una locura, y me desespera. Y en la espera me entretengo, pero no quiero, no me sirve. No me arrepiento de nada. Lo hecho, hecho está; pero si hubiese algo para borrar partes de la memoria, juro que lo haría. Y te borraría, Si el destino dice que vas a volver a aparecer, mejor. Y si no, en un desierto sólo soy capaz de alimentarme de todo esto que siento por vos, feo
Cuando era chica, creía en cuentos de hadas, varitas mágicas, príncipes azules y en ser feliz para siempre. Hoy, ya no. Ya no creo en alguien que pueda solucionar mi dolor, ya no creo en algo que cure mis problemas, en alguien perfecto para mi, ni en un conjunto de cosas que puedan llegar a producir mi felicidad eterna. Es que ya no creo en nada que no seas vos. El único ser capaz de hacerme creer que no pasa nada malo alrededor, capaz de convertir mi llanto en sonrisa, ser mi principe azul y de esta manera hacerme feliz para siempre, sos vos. ¿Qué no sos vos? Sos nada y sos todo. Juego a ser una nena chiquita, juego a creer que todo eso existe sin vos. Juego a creer que todo existe mientras en verdad ya no existe nada. No siento que ya no siento. Siento que siento lo que no debo. Lo que no me correspondés. Sueño sola poder soñar junto a vos. Sueño mi pasado, porque ya ni creo todo lo que viví, todo lo que fui capaz de sentir. Esta historia no termina acá, intento convencerme. No es tarde, es mejor que nunca. Ruego a quien deba rogar, muero cuanta vez sea necesario. Si tanto lo deseo y tanto pongo por llegar confío en que así será. Pero espero que esa confianza no sea el reflejo de la confianza que tuve en vos, confianza que fue sin sentido. Puedo suponer, en un juego absurdo de estos que me planteo, que me amaste mucho, como deciás, puedo suponer que aún te creo algo de todo lo que me decías, puedo suponer que todo lo hiciste por no lastimarme, puedo querer creer que las buenas intenciones no te dieron todo. Sonriéndole o no al pasado, las cosas te salieron mejor cuando las hiciste mal, desde lo que yo veo. Yo te invito a volver a ese samba de sentimientos en el que caímos tantas veces, te invito a intentar mantenernos en un punto para no caer. Te invito a que me agarres de las manos y que no me sueltes más, nunca más, de esa manera podría jurarte una y mil veces que sos el amor de mi vida y que a pesar de todo lo que pasó y a pesar de todo lo que pudiese llegar a pasar quiero ser tuya, porque no hay nada absolutamente más nada que quiera más que eso. No hay nada, que hoy supere mis ganas de darte un beso cada vez que te veo, a pesar de sentirme presa de esa libertad, y ver literalmente rejas entre nosotros. No hay nada que me haga pensar que no puedo volver con vos. No hay nada que me haga pensar que si puedo volver con vos. Y me encanta esto de no pensar, y espero poder, proximamente, sumarle a eso, no sólo no pensar sino sólo sentir, y dejarme llevar por los sentimientos, de esa manera encontrarme con los tuyos y que esa fusión, sea madre de la eternidad.
Porque creo que el aprovecharse de alguien no es digno. Porque no era mi inocencia, ni mi ignorancia. Era mi intención. Era lo que sentía. Porque creo en quién quiero creer. Porque confio en quien amo. Porque aunque me ponga una biquini de pocas dimensiones o un poncho abrigado, soy la misma persona. Porque el tiempo nos hace cambiar, pero no tanto. Soy yo. Fui yo. Y aunque a veces lo dude, lo niegue, lo deteste, SIEMPRE VOY A SEGUIR SIENDO YO. Una tal Rosario que compra cuentos baratos a escritores de fantasías. Porque creía en los cuentos de hadas. Creía en que no había finales. Sólo por creer. Sólo por placer. No necesitaba pruebas, ni testigos que lo avalen o demusestren lo contrario. Tenía a una sola persona que me de lo que quería y me diga lo que necesitaba escuchar. Ya tengo oidos sordos. Ya tengo las reglas del juego escritas en la frente con marcador indeleble. Ya me las aprendí y las jugué varias veces. Desde la partida, hasta la llegada. Ganando y perdiendo, y sólo una vez rindiéndome. No se como será lo que sigue. No me genera curiosidad. Siempre crei en las promesas, porque yo las cumplo. Pero nunca se me ocurrio prometerme no creer en las promesas de los demás. Nunca se me ocurrió dudar de vos.
Crecí en este frasco chico del amor, lo bueno viene en frasco chico. Lloré y dejando todo de lado, volví a reir todas las veces que lo crei necesario. No se si soy boluda o si me hago. No sé si lo que me sigue es mi sombra o mis miedos. Y no quiero darme vuelta. No puedo espiar mi pasado. Abro el telón y miro por el medio. Creo que la función está por empezar. En vez de sentarme en la butaca comodamente. Prefiero estar detrás de él y protagonizar lo que llamo como mi vida.
Luz, cámara, ación.




Pero si sos el más lindo vos nene. ¿Con quién carajo me reiria si no te tengo? ¿Con quién cocinaría patys y escupiría queso? ¿Quien me haría competencia de quién tiene el culo más duro? Gracias por perdonarme y porque así de la nada me di cuenta que me contás más de lo que pensaba y que me muero si no te tengo. Gracias por llamarme sólo para preguntarme cosas del colegio y yo me enojo y sacarme tema. Gracias porque me dejas tocarte la espalda aunque tenga la mano fría. Gracias por decir moÑÑÑÑÑito y no monnnnito. No me gusta mirar videos con vos:S son feos. Pero me encanta abrazarte y hacer representaciones de tus cosas JAJAJA. Me gusta que me mires mientras como galletitas tamaño familiar. Me gusta conocerte desde que tengo tres años. Que seas como un hermano para mi. Me gusta que me hagas acordar que aunque a veces me parezca así. SOS EL MEJOR. porque en realidad ya no catalogás como amigo. No sabés todo lo que sos para mi. Mi gordo hermoso. Mi cosa redonda. Siempre juntos. Desde los tres años, pasando por nuestras épocas de esplendor como séptimo grado, hasta hoy, y mucho más.

TE AMO INFINIDADES.




No se si fue tu mirada o tu forma de hablar, sólo sé que sentía algo especial.
NO HABLES EN PLURAL, LA RETÓRICA ES TU ARMA MÁS LETAL.

Crookshanks llevó el envío a la oficina de correos. Utilicé tu nombre, pero les dije que cogieran el oro de la cámara de Gringotts número 711, la mía. Por fa vor, considéralo como el regalo que mereces que te haga tu padrino por cumplir trece años.

También me gustaría disculparme por el susto que creo que te di aquella noche del año pasado cuando abandonaste la casa de tu tío. Sólo quería verte antes de comenzar mi viaje hacia el norte. Pero creo que te alarmaste al verme.

Te envío en la carta algo que espero que te haga disfrutar más el próximo curso en Hogwarts.

Si alguna vez me necesitas, comunícamelo. Tu le chuza me encontrará.

Volveré a escribirte pronto.

Sirius

Harry miró impaciente dentro del sobre. Había otro per gamino. Lo leyó rápidamente, y se sintió tan contento y re confortado como si se hubiera tomado de un trago una bote lla de cerveza de mantequilla.

Yo, Sirius Black, padrino de Harry Potter, autorizo por la presente a mi ahijado a visitar Hogsmeade los fines de semana.



Ni san ni sa ni brisa ya corren mi nube de algodón. Ni los, ni nos, ni vos ni yo debemos cargar esta cruz. Comprender, aceptar. Hicimos nuestro camino al caminar, y hoy decidimos frenar acá no vamos al mismo lugar. Traté de hacer a mi bien tu bien, y ves bien que me salio mal. No acostumbro a fracasar. Dijiste hasta acá ya fue me voy, mi vida no está junto a vos. Ya me canse que te de igual si soy feliz o no lo soy. Comprender, aceptar. Parecía tan fácil como sumar tu amor y mi lealtad mi ternura y tu amistad. veces Marte y Venus se llevan mal. No es cuestión de maldad. Es duro aprender a amar. Y acá estoy despidiéndome, mascando tu rencor, lo sé. No me quedo más que aceptar, soy tan culpable como vos. Yo también deje de regar la flor de la superación. Comprender, aceptar. Prometiste cuidarme sin importar y hoy ya no importa mi bienestar lo importante es tu ansiedad. Regió mi vida al azar una vez ¿sabés? No me gusta apostar, siempre me tocó pagar. Yo me propuse superar tu ausencia a pesar del dolor. Vos preferís no analizar, seguís en busca del amor. Comprender, aceptar Por más gotas de sal que le robe al mar, por más flores que un rosal. Hoy nos toca despegar. Por más gritos de paz, por más soledad. Que hoy castigue mi voluntad. Por los dos ya no va más. Y acá estoy despidiéndome. Mascando tu rencor, lo sé. Estoy confiando que el tiempo nos dirá qué hacer. Y acá estoy despidiéndome mascando tu rencor, lo sé. Estoy confiando que el tiempo nos dirá que asíestuvo bien.

22/1/10 viejo.



Sólo el tiempo trae tu recuerdo. Sólo eso. Intento no enlazar pero es imposible. Cada minuto me une a vos, y al intentar que lo contrario pase, cuando lo estoy casi logrando, recuerdo mi propósito y caigo nuevamente en mi punto de partida. Dicen que las eternidades no existen. Sí que existen, en los sueños de cada persona. Por eso es tan lindo soñar; para poder sentir al menos eso que queremos y no tenemos en la realidad.
Te encuentro en cada recuerdo. Te encuentro hoy, y más aún en mi ayer, pero anhelo que menos en mi futuro. Te encuentro en cada pedacito de pasado que viene volando. Sé que nada se olvida para siempre, sólo nos hacemos creer eso por momentos. Un amor nunca se olvida. Puede dejarse de sentir. Tampoco creo que donde hubo fuego, cenizas queden. Ya no. Ya perdí esperanzas al no tener lo que quiero, ya me rendí. Esta es una de las pocas veces en mi vida que no consigo lo que quiero y algo por lo que realmente luché. Esta vez no creí enamorarme en el camino. Aprendí a diferenciar lo que sentí por vos de lo que después vino. Nada, pero absolutamente nada hizo que yo creyera que me acercaba a vivir lo que viví por vos. Te amé más de lo que jamás hubiera imaginado. Te amé más que a nadie en este mundo. Y no niego que si hubiera que pagar por tenerte nuevamente, lo pagaría sin dudas, pero sé que ya perdí posibilidades y me harté de buscarte en otras personas. Sos el único en mi vida y sé que si lo supieras te encantaría. Pero nada cambiaría. Rescato mucho de mi pasado. Te rescato a vos principalmente. Porque fuiste el príncipe azul de mi propio e inexistente cuento. Todavía espero una de esas dos promesas. Todavía espero que nunca te olvides de mi. Que algún día dentro de treinta años me recuerdes aunque sea por al menos un minuto. Uno por los miles que están conmigo...
QUIÉN YO QUERÍA QUE FUERA? FUE TODOS. MENOS ESE.

Salía por una ventana. Primero se agarró de la rama de un árbol y recogiéndose el pelo bajó sigilosamente. Todo el tiempo la mirada hacia el cielo. Tanteaba lo que seguía abajo de donde estaba ella. Para no caerse. La luz de la luna se proyectaba sobre su cara como un continuo suspiro de cansancio. No permitía que su cabeza descienda ni un milímetro. No quería. Era como si sufriera vértigo aún estando con los pies sobre el piso. Pero no era vértigo. Era otra cosa, otra fobia interna que le nacía de bien adentro. Con cuidado llegó hasta dónde no había ninguna posibilidad del encuentro con ella misma. No había ninguna posibilidad de lastimarse. Era lo que estaba buscando hace tiempo. No era mucho. Pero para ella no significaba poco. Oscuridad, penumbra, ceguera ocasional y opcional. Paz. Utopía.